*A VER SI ABBOTT NO EMULA A TRUMP
*ESPINO QUISO HACER ENTRAR EN RAZÓN A AMLO
*LA DOBLE CARA DE AMLO
Ha de haber sentido feo la gobernadora Maru Campos, cuando leyó lo que dijo el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acerca de cómo doblegó al actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
El republicano bocón como siempre, señaló que apenas amenazó a don AMLO, puso soldados gratis en la frontera, para cuidar que no pasaran migrantes la frontera para ir a Estados Unidos.
Se refirió obviamente a los elementos de la Guardia Nacional que disciplinados, se apostaron en las márgenes del río Bravo para atemorizar a los pobres migrantes que venían desde Honduras, Guatemala y otros muchos lugares y los paraban en seco.
Así que ahora que ha ofrecido Maru campos parar también a los migrantes, tras la amenaza de otro republicano, como lo es Greg Abbott, nomás falta que también se mofen de ella igual.
Respecto a AMLO, dijo Trump: ‘es uno de los socialistas que me gustan. Nunca he visto a nadie doblarse así’.
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Hablando de López Obrador, este lunes se prevé que dé respuesta a los dichos de Donald Trump, de que se arrodilló.
Se las da el presidente de muy bravucón, pero simple y sencillamente se puso de tapete con el presidente de Estados Unidos, es la verdad.
Lo curioso es que AMLO prefirió jugársela con Trump, pese a ser también éste último, ultraconservador, siendo que el presiente de México, dice odiar a los conservadores.
Respecto a Trump, nunca le soltó ninguna de sus típicos adjetivos: hipócrita, doble cara, mentiroso, entre otras.
Por el contrario, se le puso de hinojos y hasta lo respaldó en su segunda campaña, cuando se supone debió apoyar a Joe Biden, por ser de su misma tendencia ideológica. Pura farsa.
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Según se menciona, el senador chihuahuense, Rafael Espino, estuvo siempre cercano al presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando estuvo planteando la iniciativa de reforma Eléctrica.
Le hizo ver en todo momento al titular del Poder Ejecutivo, que algunos aspectos vulneraban la propia Constitución, por lo que ofrecía alternativas a puntos específicos.
Aunque finalmente la reforma fue desechada por falta de los votos suficientes, quedó demostrado que la lealtad del legislador Espino estuvo ahí.