*DESTAPAN EMPRESARIOS A CANDIDATEABLES EN CHIHUAHUA
*SEPULTA VALENZUELA ASPIRACIONES POLÍTICAS
*¿DIRECTOR DEL IMSS 66 ENFERMÓ DE ESO?
*LA VUELTA A LA NORMALIDAD
Los empresarios de Coparmex en Chihuahua le pusieron el cascabel al gato, al organizar un foro de diálogo con algunos de los que buscan la gubernatura para el 2021.
Eso no tendría nada de malo, sino porque hicieron una lista muy pequeña, cuando en realidad es muy grande, de tal manera que despertaron cosquilleo intenso en los actores políticos que no fueron considerados.
Será virtual la plática con cada uno de sus invitados.
Anunciaron conversaciones con Cruz Pérez Cuellar (Morena), Maru Campos Galván (PAN), Alejandro Cano Ricaud (PRI), Rafael Espino de la Peña (Morena), Gustavo Madero Muñoz (PAN), Graciela Ortiz González (PRI) y Armando Cabada (independiente).
De momento dejan fuera a varios otros, como Juan Carlos Loera de la Rosa, de Morena; Omar Bazán del PRI; Alejandro Díaz Villalobos (Morena) y Alfredo Lozoya ‘El Caballo’, independiente.
Se vieron parciales y algunos dijeron que Coparmex hizo su proio destape, y en plena etapa de pandemia.
Hasta lo vieron como falta de sensibilidad, por andar pensando en política electoral, en lugar de enfocarse a la crisis económica y de salud que mantiene a los chihuahuenses de cabeza.
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Arturo Valenzuela Zorrilla no emitió ningún comunicado de disculpa pública, por la ofensa que hizo al personal médico que se ha estado jugando la vida para combatir el Covid-19.
Se supone que es un profesionista respetable, pero con los comentarios vertidos en una rueda de prensa contra sus propios colegas, dejó en entredicho su seriedad, para dar paso a un tipo vulgar, corriente, por decir lo menos.
Les dijo que si querían su bono Covid que fueran a pedirle un cambio a donde estaba lo más pesado, a la primera línea de fuego. Casi les pidió que se fueran a morir al frente de guerra, ya que sólo así merecerían el miserable bono que han pedido, pese a que así se los prometieron y que ha sido pagado por empresarios, ni siquiera por el gobierno y menos de la bolsa de Valenzuela.
Si alguna aspiración política tiene Zorrilla, que la vaya sepultando, porque esta no se la perdona nadie.
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No se conforman las autoridades de salud, con ocultar de forma regular la información relativa a los casos de coronavirus, sino que ahora hasta se dan el lujo de retraerse, de recular.
Desde hace días ya se traía en el rumor de que el director de la clínica 66 del IMSS había resultado positivo al Covid-19, pero apenas ayer por la mañana se reconoció oficialmente el dato.
La cosa fue que los periodistas ya lo daban por hecho cuando por la tarde se envió un comunicado oficial, con la “Fe de Erratas”.
Decía:
“En la Conferencia Informativa sobre la Situación del Coranovirus en el Estado de Chihuahua del pasado 13 de mayo se señaló erróneamente que un directivo de la Clínica 66 del Instituto Mexicano del Seguro Social en Ciudad Juárez había resultado positivo a la prueba del laboratorio.
Dicha información no es precisa, derivó de una confusión que se originó en una información incompleta.
Enviamos una disculpa pública por ese lamentable error humano, con el compromiso de hacer saber, de manera oportuna, una vez se tenga el resultado definitivo y validado”.
Se niega, pero a la vez se deja abierta la puerta para confirmarlo después.
Qué caray.
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Con la parafernalia debida, las autoridades de los tres niveles de gobierno dieron a conocer el plan de reactivación de la vida económica, social y deportiva del país, la cual se hará de forma escalonada o semaforizada, de acuerdo a la problemática propia de cada región.
Son tres fases, pero se entendió que el próximo 18 de mayo les corresponderá a los municipios más limpios de Covid, la vuelta a la normalidad.
Obvio Juárez y Chihuahua no son de esos “municipios de la esperanza”, por lo que tendrán que esperar para más adelante, justo al 1 de junio.
La gente ya no soporta el encierro y está desesperada –sobre todo quienes quedaron desempleados y sin dinero- por volver a sus actividades cotidianas, pero el problema es que la crisis de la pandemia está en su punto más alto y se espera a que empiece a decrecer.
