*INSISTEN EN ATORAR A EMPRESARIOS UÑAS LARGAS
*LE MIENTAN LA MANDARINA OTRA VEZ A CORRAL
*GRUPOS CRIMINALES EXHIBEN SU PODERÍO CON ARSENAL DE GUERRA
Parece que ahora sí van a citar a comparecer en el Cabildo al titular del Fideicomiso del Centro de Convenciones, Carlos Murguía Chávez.
La historia de ese órgano es de corrupción descarada, porque van 20 años cobrando aportaciones pero nada se ha construido y el dinero lo han esfumado.
Pero no se trata solamente de darle un apretón de tuercas, de hacer que en sesión de Cabildo se ponga rojo del rostro, sino que verdaderamente regresen el recurso y lo pongan a trabajar en un espacio que si se necesita para la ciudad.
Semanas atrás dichos empresarios quisieron pasarse de listos, poniendo al alcalde Cruz Pérez Cuéllar como su supuesto padrino ante el gobierno federal, pero lo cantaron antes de tiempo y el presidente los bateó feo.
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Por segunda ocasión en poco más de un año, el ex gobernador se dio un topón con el empresario taurino Kike Valles.
En ambas ocasiones a Javier Corral le rayaron la madre.
Sobre el percance último, se dio a conocer que ocurrió en el restaurante Las Faenas ubicado en el Periférico de la Juventud.
De inicio, se mencionó que Kike le dio un bachón en el cerebelo, sin embargo ante la andanada de comentarios en las redes sociales, salió Corral a dar su versión, donde no mencionó sobre algún sopapo que le hayan dado en la nuca.
Tampoco reconoció que le haya dicho “pinche corrupto” a Kike, aunque a decir de testigos, eso fue lo que desató la respuesta del aludido.
De hecho el ex funcionario advirtió que va a poner una demanda, pero en la FGR, a pesar de que no habría competencia. Considera que en la FGE no tendría caso, al considerar que lo tienen vetado tanto la gobernadora Maru Campos como el fiscal César Jáuregui.
Corral estaba en una comida con Jorge Espinoza y Luis Fernando Mesta, probablemente sus dos únicos incondicionales –y eso no tanto, porque se dice que Espinoza saludó más que efusivo a Kike delante de Corral.
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El fiscal de la zona Norte, Jesús Manuel Carrasco Chacón, informó hace unos días que habían logrado arrebatarle al grupo de El Neto, nada más y nada menos que 76 armas, muchas de ellas armas largas, a raíz de los hechos del 1 de enero, donde éste logró fugarse del penal con otros tantos reos.
Así que con el cateo que realizaron el domingo y se aseguraron otras 25 armas, ya se alcanzó la cifra de 100 armas nomás a ese grupo de Los Mexicles.
El detalle es que no es la única banda que opera en la ciudad, así que imaginemos cuántas piezas de ese tipo no circularán en las calles, dispuestas por los sicarios para arremeter contra sus rivales.
Es una urbe que puede convertirse en un polvorín en cualquier momento.
