*LE ATORA CRUZ A LA SEGURIDAD
*CHAMAQUEARON A MORENISTAS EN EL CONGRESO
*LOYA AUSENTE DE JUÁREZ
El alcalde de Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, echó la casa por la ventana, al presentar el programa Juárez Vigilante ayer por la tarde-noche.
Se habla de más de 200 millones de pesos invertidos en materia de seguridad para Ciudad Juárez, lo cual tanto se necesita.
Tan sólo son 100 millones de pesos para equipo táctico, armamento y municiones, donde además se adquirirían 3 mil brazaletes para casos de violencia contra la mujer.
Se tendrán en un mediano plazo, un total de 800 patrullas, de las 300 que actualmente se tienen.
Además se instalarán mil nuevas cámaras de video vigilancia, las cuales serán ubicadas en 250 puntos estratégicos de la ciudad para que sumadas a las 276 cámaras actuales la ciudad cuente con 1,276 cámaras propias.
Esto es independiente de los planes y programas de Gobierno del Estado, sin contar con que es la policía municipal, la que cuenta con el mayor estado de fuerza de la localidad, porque la verdad de las cosas es que los otros órdenes de gobierno mantienen en la ciudad una presencia más que nada simbólica.
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Los morenistas quedaron estupefactos, luego de la jugada maestra que les hicieron os del PAN en el Congreso local.
De plano quedaron chiflando en la loma la ex panista, María Antonieta Pérez Reyes y Benjamín Carrera, quienes ya creían estar presidiendo la máxima tribuna del estado de Chihuahua, sólo por el hecho de ser de Morena.
En la Junta de Coordinación Política, alias la JUCOPO, se propuso a Adriana Terrazas Porras para presidir y se aprobó por el PAN, PT y PRI.
Así que ya está lista para ser votada en el pleno en as próximas horas.
Sabemos que Adriana es más priista que Bartlett –ahora ambos de Morena-, así que no tiene la sujeción a Juan Carlos Loera de la Rosa ni a ningún otro morenista.
Así que los panistas confían en que habrán sacado adelante a la morenista Adriana y sea la que garantice “la gobernabilidad”.
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Dicen que eso de que la Policía Estatal tenga su sede permanente en Juárez, no debiera ser sólo para el edificio y de membrete.
Los críticos refieren que el máximo jefe, don Gilberto Loya, debiera también estar físicamente en la ciudad de manera más regular.
Y es que el pasado ‘jueves negro’, el ingeniero dicen que de plano estaba a más de 300 kilómetros de Juárez, de tal manera que cuando llegó por acá, el mayor reto de seguridad que ha tenido el municipio fronterizo, ya había pasado.
Ya nomás vino para tomarse unas fotos arriba de una patrulla, pero al siguiente día.
Ojalá y la gobernadora le ordene que venga más seguido a Juárez.
