Diez millones viven con indocumentados; censo nacional de Estados Unidos

SAN DIEGO.- Al menos diez millones de estadunidenses viven con inmigrantes indocumentados, de acuerdo con un análisis de la reciente actualización del censo nacional.

Más de 4.9 millones de esos estadunidenses son hijos de quienes al menos uno de sus padres es inmigrante indocumentado. Esto es, en parte, porque 1.7 millones de ciudadanos estadunidenses están casados con inmigrantes indocumentados.

De acuerdo con un informe que busca influir para que el Congreso apruebe el paquete económico que incluye una reforma a la inmigración, los indocumentados se encuentran en un tejido social de 22 millones de hogares estadunidenses con familias con condición migratoria mixta.

Esas familias incluyen a ciudadanos estadunidenses, también miembros que residen legalmente en el país e indocumentados.

El análisis de cifras del censo que presentó ayer el grupo defensor de migrantes FWD considera que para beneficiar a todo ese tejido social lo mejor sería conceder a los indocumentados que ya viven en el país posibilidades de convertirse en ciudadanos estadunidenses.

Por el lado económico, regularizar la condición migratoria de los indocumentados se traduce en una aportación anual de 75,000 millones de dólares, de acuerdo con el demógrafo Phillip Connor.

La aportación se desglosa en 59,000 millones de dólares anuales directamente a la economía y 16,000 millones de dólares en impuestos para los tres niveles de gobierno.

La propuesta en la que quiere influir el grupo es la iniciativa del presidente Joe Biden de invertir 3.5 billones de dólares en infraestructura en todo el país.

Esa iniciativa contiene propuestas para regularizar la condición migratoria de los dreamers, los campesinos indocumentados y los extranjeros que han vivido en el país con TPS, o Estatus de Protección Temporal ante deportaciones. Juntos suman unos ocho millones de indocumentados.

Además, hay una propuesta para regularizar también a familiares, con lo que se beneficiaría en total a cerca de 11 millones de indocumentados.

El Senado tiene ahora la oportunidad de aprobar la propuesta billonaria que contiene el cambio para los indocumentados mediante un procedimiento de voto llamado “reconciliación”, que es una mayoría simple en la votación.

En el Senado hay ahora 50 senadores republicanos y 50 demócratas, pero en “reconciliación” el empate se rompe con el voto de la vicepresidenta, Kamala Harris, quien ya se ha comprometido a impulsar una reforma migratoria.

La bancada republicana insiste en que la reforma migratoria se enfoque únicamente en reformar la vigilancia fronteriza y en expulsar a los indocumentados.

El grupo FWD se enfoca en la bancada demócrata, con la idea de que, además, regularizar a los indocumentados se traduciría en millones de votos electorales a futuro.