Exhiben a Chihuahua por excesiva deuda de corto plazo

Cd. de México.- Para salir a flote ante la caída en las transferencias federales, los estados y municipios del País incrementaron en 86 por ciento su contratación de deuda de corto plazo, lo que representa un mayor riesgo para sus finanzas.

Al cierre de julio, se contrataron 8 mil 966 millones de pesos, según Hacienda, mientras que en el mismo periodo de 2019, el monto fue de 4 mil 644 millones.

El incremento de deuda a corto plazo aumenta de forma significativa el riesgo de impago, dijo Daniela Brandazza, analista subnacional de S&P.

“Cuando aumenta el financiamiento de corto plazo ayuda a los estados a subsanar temas más inmediatos, pero si no se planea correctamente pueden verse en problemas para pagar”, comentó.

El uso de créditos cortos es un problema estructural que se venía arrastrando desde antes de la pandemia, explicó, por los desequilibrios entre ingresos y gastos.

No obstante, con la pandemia se agravó la baja de participaciones federales y aumentaron las presiones de atender temas de salud. Además, varios estados realizaron diferimientos en pagos de impuestos, lo que disminuyó su flujo de ingresos.

“Estamos viendo 2021 como el año de mayor preocupación para el tema de cómo evolucionará el financiamiento de corto plazo, porque si no se toman las decisiones correctas puede haber niveles que sean muy difíciles de pagar en tiempo y forma”, anticipó Brandazza.

Aquellos cortos plazos usados de forma recurrente para pagar gasto corriente, como nómina, son menos sustentables que los usados como créditos puentes para liquidar un compromiso en lo que reciben otro ingreso garantizado.

En lo que va del año, el Estado de México ha sido el que más ha contratado deuda a corto plazo, con 2 mil 500 millones de pesos, a una tasa de 6 por ciento promedio; seguido de Jalisco, con mil 900 millones, también a 6 por ciento, y Chihuahua, con mil 450 millones, a 7 por ciento.

Estas entidades contrataron deuda a una tasa inferior al promedio, que es de 9 por ciento para corto plazo.

Sin embargo, algunos Gobiernos contrataron a más del doble, como Toluca, que recurrió a un préstamo de 193 millones a tasa de 23 por ciento. Destacan también los créditos que obtuvieron Zitácuaro y Apizaco.

Del total de la deuda a corto plazo, 3 mil 873 millones de pesos fueron prestados por Banorte, 2 mil millones por HSBC México y mil 400 millones por BBVA.

El resto se reparte entre Santander, Banco Azteca, Bansi, Banca Afirme y Financiera Local.

Jorge Cano
Reforma