Mujer con demencia se refugia en los brazos de su esposo: “No lo recuerda, pero se siente a salvo”

“Si eso no es amor verdadero, no sé qué es”, comentó Kelli Taylor sobre la relación de su padre y su madre, quien se encontraba en una etapa final de demencia. “Llevan 34 años casados y mi papá la cuida a tiempo completo”.

Las parejas que juran estar juntas para toda la vida incluyen los momentos duros, los cuales deberán enfrentar unidos. Es en esas situaciones de gran dificultad cuando el amor que sienten el uno por el otro debe ser mayor.

Y es que, aunque existan enamorados que les cueste un poco pasar por estas pruebas de lealtad, hay otras parejas que definitivamente nacieron para estar juntas. Un ejemplo de ellos son estos esposos que, luego de tres décadas casados, demostraron estar el uno para el otro en los días duros cuando ella comenzó a padecer demencia.

Según publicó Kelli Taylor en su cuenta en la red social Twitter, sus padres estaban atravesando un momento difícil cuando su madre, Phyllis, llegó a las etapas finales de la demencia. Sin embargo, no dejaba de sentirse segura en los brazos de su querido esposo, por lo cual solía recostarse y dormirse encima de él. En uno de esos momentos Kelli los fotografió, inmortalizando una tierna escena.

“Mis padres llevan 34 años casados. Mi madre se encuentra en las etapas finales de la demencia de inicio joven (diagnosticada hace 5 años a los 53 años). Mi papá la cuida a tiempo completo”, escribió Kelli en la publicación junto a la tierna fotografía.

“No siempre recuerda su nombre, pero sabe que está a salvo con él. Si eso no es amor verdadero, no sé qué es”, añadió.


Esta fotografía fue tomada en abril de 2018, momento en que generó una reacción de solidaridad de muchos usuarios. Lamentablemente, la mujer falleció solo un mes después, tal como publicó su hija el 29 de mayo de ese año.

“Ha sido un viaje largo e insoportable con muchas pérdidas a lo largo del camino, por lo que estamos aliviados de que ella ya no esté sufriendo. Pero eso no alivia el dolor de esta pérdida final. Estoy desconsolada. No puedo creer que ya no pueda abrazarla“, escribió Kelli.