Internacional.- El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, denunció que en enero pasado se registró un intento golpista durante la violenta arremetida del narcotráfico, durante la cual hubo una veintena de muertos y derivó en la declaratoria del estado de conflicto armado interno para neutralizar a grupos “terroristas”.
La fuga de un líder criminal de una cárcel desató en enero una fuerte embestida de bandas ligadas a la mafia albanesa y cárteles de México y Colombia con violentos amotinamientos de presos, ataques contra la prensa, explosiones de autos bomba, la retención temporal de unos 200 guardias carcelarios y policías, dejando además una veintena de muertos.
Noboa decretó entonces un estado de excepción para movilizar a los militares, el cual duró los 90 días que permite la ley. También, declaró al país en conflicto armado interno, que de acuerdo con la Corte Constitucional, puede extenderse por tiempo indefinido.
Bajo esa declaratoria, ordenó a las Fuerzas Armadas neutralizar una veintena de organizaciones criminales, a las que tildó de “terroristas” y “beligerantes”, y que son acusadas de infiltrarse en todas las esferas estatales como la justicia.
El jefe de Estado señaló que las mafias “cuentan con cómplices y aliados en todos los niveles del país (…) están en todos lados”.
