Chihuahua, Chih.- La “nómina secreta” del exgobernador César Duarte, a través de la cual desvió al menos mil millones de pesos del erario de Chihuahua, no hizo distingos de partidos políticos.
La Fiscalía General del Estado abrió carpetas de investigación lo mismo a miembros del PRI, de Movimiento Ciudadano y del mismo PAN, partido al que pertenece el gobernador Javier Corral.
Actualmente, la dependencia tiene abiertas investigaciones en contra del senador de Morena, Cruz Pérez, y la alcaldesa panista María Eugenia Campos, aspirantes a la gubernatura.
Otros políticos, como Cristopher James Barousse, exsecretario de Vinculación con la Sociedad Civil del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, están vinculados a proceso.
Incluso, ya se han emitido sentencias por este caso, como ocurrió con el exdiputado local por Movimiento Ciudadano, Fernando Reyes, quien aceptó en un juicio abreviado haber recibido dinero del exmandatario de Chihuahua.
Según la investigación de la Fiscalía, el dinero era utilizado por el exgobernador priista para cubrir en efectivo compromisos personales y de proyección política.
Durante 2012, 2013, 2014 y 2015, Duarte presuntamente instruyó a varios funcionarios de la Secretaría de Hacienda para que desviaran recursos para más de 120 personas.
La indagatoria indica que se emitían mensualmente cheques de 5 a 20 millones de pesos, los cuales eran depositados a una empresa de traslado de valores, para que ésta a su vez hiciera llegar el dinero de forma líquida a las oficinas de la Tesorería Estatal.
Agencia Reforma
