Rodilla en el cuello: una práctica común

LE PECQ, Francia.- Tres días después de que George Floyd muriera asfixiado luego de que un oficial le puso la rodilla en el cuello, otro individuo de raza negra recibía un trato parecido de la Policía francesa en una calle de París.

Las técnicas de inmovilización en las que los agentes aplican presión con sus rodillas sobre alguien que esta tirado en el piso boca abajo son comunes en todo el mundo y muy criticadas. Una de las razones por las que la muerte de Floyd escandalizó tanto es que muchas muertes han sido atribuidas a esa técnica, incluso fuera de EU, y con frecuencia las víctimas no son blancas.

“No podemos decir que lo sucedido en EU es algo desconocido para nosotros”, expresó el legislador francés Francois Ruffin, quien ha pedido que se prohíban las técnicas de paralización boca abajo.

El arresto del 28 de mayo en París de un hombre de raza negra que, estando en el piso boca arriba, fue inmovilizado por un agente que le colocó la rodilla en la parte alta del pecho, casi en el cuello, es uno de varios episodios que están siendo comparados con el de Floyd, fallecido el 25 de mayo en Minneapolis.

Las reglas para usar esta técnica varían de país en país.

En Bélgica, el instructor de la Policía Stany Durieux dice que castiga a los agentes que entrena, restándoles puntos, “cada vez que veo que posan la rodilla en la columna vertebral”.

En Alemania, los agentes están autorizados a ejercer presión brevemente en la cabeza de un sospechoso pero no en el cuello, según el sindicato de policías.

El Colegio de Policías del Reino Unido, por su parte, dice que los sospechosos que han sido tendidos en el piso boca abajo deben ser colocados de costado, arrodillados o parados “lo antes posible”.

Pero incluso dentro de un mismo país las reglas pueden variar.

El manual de la Policía de Nueva York dice en mayúsculas, con negritas, que los agentes “NO DEBEN” usar técnicas asfixiantes y deben “evitar toda acción que pueda generar presión en el pecho” limitando la capacidad de respirar. La Policía de San Diego, en cambio, permitía una toma en la que se aplica presión en el cuello con un brazo, aunque eso cambió después de la muerte de Floyd.

Christophe Rouget, dirigente sindical galo que habló con los legisladores en marzo en torno a la propuesta de eliminar técnicas asfixiantes, dijo que si un agente no usa su pistola ni armas paralizantes, la opción más segura para inmovilizar a alguien es tenderlo boca abajo.

“No tenemos 5 mil opciones”, expresó. “Estas técnicas son empleadas por las policías de todo el mundo porque son las menos peligrosas. Pero deben ser bien aplicadas”.