Rusia.- Las autoridades rusas anunciaron el viernes que evacuarán cinco pueblos próximos a la frontera con Ucrania en la región de Bélgorod, vecina a la de Kursk, donde las tropas ucranianas realizan una sorpresiva incursión desde hace diez días.
Ucrania aseguró el viernes que sus tropas siguen avanzando en la región rusa de Kursk e indicó que uno de los objetivos de la inédita ofensiva es forzar a Moscú a entablar negociaciones “justas” para poner fin a dos años y medio de guerra. Las tropas ucranianas lanzaron el 6 de agosto un ataque sorpresa en esa zona fronteriza, en la mayor incursión de un ejército extranjero en suelo ruso desde el final de la Segunda Guerra Mundial.
El comandante del ejército ucraniano, Oleksandr Sirski, afirmó el viernes que sus tropas “siguen combatiendo y en algunas zonas han avanzado de uno a tres kilómetros”. El jueves, había indicado que ya controlaban mil150 km² y 82 localidades rusas, entre ellas Sudzha, a 10 km de la frontera y punto clave para el envío de gas a países de la Unión Europea a través de Ucrania.
La operación llevó a territorio ruso la guerra que se inició en febrero de 2022, cuando Rusia invadió Ucrania, apoderándose de vastas regiones del este y del sur de la exrepública soviética. Ucrania expuso varias razones para justificar su asalto, entre ellas la de obligar a Moscú a retirar tropas de otras partes del frente o la de crear una “zona de amortiguamiento” para protegerse de los bombardeos desde territorio ruso.
Pero cada vez está más claro que Kiev también pretende utilizar los territorios rusos tomados como moneda de cambio en posibles negociaciones con el Kremlin.
Un diplomático ucraniano ya había instado el martes a Rusia a aceptar “una paz justa”, bajo las condiciones de Ucrania.
Las negociaciones están completamente estancadas desde el inicio del conflicto, debido a exigencias difícilmente conciliables. Zelenski indicó que quiere elaborar un plan antes de las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos, su principal aliado, que sirva de base para una futura cumbre de paz.
El mandatario repite que la paz solo es posible si el ejército ruso se retira completamente del territorio ucraniano, incluida la península de Crimea que Rusia se anexionó en 2014. Su homólogo ruso, Vladimir Putin, condiciona las negociaciones a que Ucrania ceda los territorios ocupados por las tropas de Moscú y renuncie a ingresar en la OTAN, requisitos inaceptables para Ucrania y sus aliados occidentales.