Sequía extrema en Chihuahua, la peor en 50 años

En los últimos meses la sequía extrema ha golpeado duramente a agricultores del estado de Chihuahua, pues se considera la más dura en más de 50 años y advierten que está en riesgo la producción de alimentos en el estado y el país.

Ricardo Acosta, presidente del Comité Estatal de Sanidad Ambiental de Chihuahua, aseguró que el escenario es complicado, toda vez que hay zonas que dependen del agua rodada de las presas y en ese sentido las presas no tienen suficiencia de agua porque no captaron agua el año pasado.

“Estamos limitados, no todas las hectáreas están sembradas y por otro lado hay zonas de riego de pozos profundos donde hay escasez de agua porque los mantos acuíferos están sobreexplotados y se está extrayendo más agua de lo debido y esto provoca una falta de energía”.

“Entonces la Comisión Federal de Electricidad ya no cuenta con la infraestructura necesaria para poder abastecer esa energía”, explicó.

Aunado a temperaturas superiores a los 45 grados centígrados y a la falta de lluvia, los cortes de luz han afectado los cultivos en Cuauhtémoc, donde el maíz se encuentra estresado y los cultivos están en riesgo.

Johan Peters, productor menonita, es uno de muchos afectados por esta situación, pues en las últimas semanas el suministro de luz ha sido cortado.

“Está muy difícil la situación con la sequía. No ha caído agua y ha habido muchos cortes de luz. El año pasado también fue problemático por la luz, pero no como ahora, esperamos que pronto llueva”, indicó.

Otro sector afectado ha sido el de la ganadería, encima de que los apoyos para el campo fueron retirados por el gobierno federal.

Luis Valles, ganadero en Chihuahua, lamenta que ha sido el peor momento en los últimos 50 años y los estragos ya comienzan a verse.

“Hay bastantes productores que han dejado solos sus ranchos, estamos en peligro de que si se alarga esta sequía pues muchos pequeños productores van a quedarse sin su único sustento de vida que es la ganadería, estamos sufriendo bastante”.

“La pastura está más cara, el rastrojo de maíz ya se acabó, todo está en contra, el panorama es negro para el campo. Estamos hablando de un año desastroso”, afirmó.

A pesar de que los agricultores conocen el comportamiento de la sequía, pues ha sido cíclica y repetitiva, existe una gran preocupación por la sequía hidrológica.
Fernando Pérez Eseberre, gerente regional de ventas para empresas “Dragón”, dedicada a proteger los cultivos mexicanos, explica que hay tres factores determinantes que influyen en esta problemática: cada vez hay más humanos, hay menos tierra cultivable y cada vez hay menos agua.

“La agricultura ahorita está pasando por una situación muy complicada, las presas están por debajo del 20% entonces lo que está ocasionando es que ya muchos cultivos están sometidos a una presión de estrés y algunos están teniendo muerte prematura. No se están completando las toneladas para alimentar el ganado”.

“Todo esto es una cadena y lo más catastrófico puede ser la escasez de alimentos, esto se convierte en un tema social que nos impacta a todos”, asegura.

Con las presas a niveles por debajo del 20 por ciento, los productores apenas sacarán el ciclo de este año que termina el próximo 30 de septiembre, pero para el 2025 no existe más que incertidumbre, al no tener lluvia ni vital líquido acumulado en las presas.

La presa La Boquilla tiene un almacenamiento total de dos mil 800 millones de metros cúbicos de agua, de los cuales en la actualidad solo cuenta con 800, lo que significa el 22.5 por ciento de su capacidad, o la presa Francisco I. Madero, que se encuentra al 18 por ciento de su capacidad, pues de los 333 millones de metros cúbicos de agua, apenas cuenta 60 millones.

“No porque nos caiga una buena lluvia se va a resolver, si no empezamos a trabajar, a cambiar la mentalidad y empezar a aplicar nuevas estrategias y formas de trabajo”, explica Fernando Pérez Eseberre.

Este escenario ha llevado a que muchos de los productores se apoyan de agroquímicos que permitan maximizar la productividad y hacer frente a las plagas y enfermedades que derivan de esta sequía extrema.

Cristina Barajas, representante de empresas “Dragón” en Chihuahua, asegura que ellos son “los doctores de plantitas” pues la mayoría de los cultivos se encuentran estresados y se ha reducido la mitad la superficie de siembras.

Héctor García, asesor técnico asesor del árbol de nogal, que da nueces, advierte que este año es difícil porque se genera una sola cosecha al año.

“Es una sola entrada de dinero y si no hay agua no van a tener su producción, entonces en la cadena de valores ellos se van a ver muy afectados, porque ellos contratan gente para cosechas para pizcas, para podas y todo eso no va a suceder”, agregó.