El Salvador denuncia que la muerte de 40 migrantes en México fue “un crimen de Estado”; exige cese del titular del INM

A una semana de la muerte de 40 migrantes en la estancia provisional del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez, Chihuahua, las autoridades de El Salvador lanzaron en la noche de ayer un duro mensaje en contra del gobierno de México, al que acusaron directamente de haber cometido “una masacre” y “un crimen de Estado”, luego de que se diera a conocer que los custodios privados y del INM no dejaron salir de sus celdas a los migrantes que fallecieron en un incendio.

“El Salvador exige una condena ante este crimen que lo cataloga como un crimen de Estado. Nosotros tenemos la suficiente moral para exigir justicia ante esta masacre que el gobierno mexicano ha dado a nuestros connacionales migrantes”, dijo Cindy Mariella Portal, viceministra de Diáspora y Movilidad Humana del gobierno salvadoreño de Nayib Bukele, quien además repitió en varias ocasiones que su Ejecutivo cataloga lo sucedido como un “crimen de Estado” del que “México se tiene que hacer responsable”.

En una conferencia de prensa este lunes al salir de las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) en Ciudad Juárez, la funcionaria salvadoreña acusó a las autoridades mexicanas de “echarse la bolita”, entre la Secretaría de Gobernación y la Cancillería, para no investigar a fondo la muerte de los 40 migrantes, entre ellos, siete salvadoreños. Y, además, demandó que no solo se cese de su cargo a Francisco Garduño, titular del INM, sino que se le abra “un proceso” de investigación para determinar posibles responsabilidades de todos los “altos mandos” que toman decisiones en la política migratoria mexicana.

“Nosotros hemos exigido que el responsable, el director del Instituto Nacional de Migración, sea destituido. Y no solo la destitución, sino también el procesamiento del mismo. Hemos exigido que se condene con cárcel a los responsables, y no solo a los que no actuaron frente a la emergencia, sino a aquellos responsables de la política migratoria, que hasta el momento no ha existido ningún secretario de Estado que haya sido cesado ni procesado”, reclamó la viceministra.

“Yo considero que el primer acto de corrupción es aceptar un puesto para el cual no estamos preparados”, insistió.

Asimismo, la funcionaria dijo que las autoridades salvadoreñas están analizando regresar los cuerpos de los siete salvadoreños a su país por “vía terrestre”, puesto que, debido a las vacaciones de Semana Santa, “es casi imposible” encontrar vuelos.

“El gobierno mexicano nos ofreció un vuelo, pero no nos dan fechas. Y nosotros necesitamos ya fechas”, urgió la viceministra del país centroamericano, que aseguró que los familiares de las víctimas exigen el retorno inmediato de los restos de los fallecidos.

Cindy Mariella Portal también recordó que el Estado mexicano aún no ha reparado ni ha dado justicia a las víctimas y los familiares de los 14 salvadoreños asesinados en Tamaulipas en 2010, en un caso conocido como “Tamaulipas 1”. Dijo que tampoco ha habido resarcimiento por la masacre de San Fernando, también en Tamaulipas, donde 72 migrantes fueron asesinados y enterrados en fosas del crimen organizado.

La funcionaria agregó que tampoco hay justicia aún para Victoria Salazar, asesinada en 2021 por policías de Cancún, en Quintana Roo, “a pesar de que fue un caso que fue noticia a nivel internacional”. Mientras que el caso de César Adonai, otro salvadoreño fallecido también a manos de policías federales en Villahermosa, Tabasco, también continúa en la impunidad, subrayó la servidora pública.

Por último, exigió un “cese a la xenofobia” en contra de las personas migrantes, y volvió a acusar al gobierno mexicano de tratar “como animales” a quienes buscan migrar sin documentos.

“No queremos que los traten como animales. Son personas tan importantes como ustedes y como yo, queremos que pare esta xenofobia para el pueblo centroamericano, porque nos están tratando de la misma forma que a ustedes los tratan en Estados Unidos”, sentenció.

La semana pasada, al referirse al caso de los migrantes fallecidos el 27 de marzo en Ciudad Juárez, el presidente López Obrador dijo que este hecho es uno de los que más lo han conmovido en lo que va de su sexenio. Sin embargo, hasta ahora se ha negado a hacer ceses en su equipo y afirma que primero debe haber investigaciones (Animal Político).