En febrero de 2022, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) aumentó 0.83 por ciento respecto al mes anterior; con este resultado, la inflación general anual se ubicó en 7.28 por ciento, por arriba de la inflación de enero, cuando fue de 7.07 por ciento, de acuerdo con la información publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los productos y servicios que registraron aumento de precios y tuvieron mayor incidencia en la inflación general fueron: gas doméstico LP; pollo; servicios en loncherías, fondas, torterías y taquerías; gasolina de bajo octanaje; limón; carne de res; vivienda propia; tortilla de maíz; automóviles; y aguacate.
No obstante, lo anterior estuvo parcialmente contrarrestado por precios más bajos en el jitomate, chile poblano, tomate verde, calabacita, papa y otros tubérculos, carne de cerdo, lechuga y col, otros chiles frescos, frijol y gas doméstico natural.
Inflación subyacente
Al interior del INPC, el índice de precios subyacente (excluye precios de bienes y servicios más volátiles, como agropecuarios y energéticos) tuvo un aumento mensual de 0.76 por ciento y anual de 6.59 por ciento, el nivel más alto desde junio de 2001.
Al interior del índice subyacente, a tasa mensual, los precios de las mercancías se incrementaron 0.96 por ciento y los de los servicios 0.52 por ciento.
Dentro del índice no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 0.52 por ciento y los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno 1.45 por ciento a tasa mensual.