Se confirmó la muerte de Yevgeny Prigozhin, líder del grupo mercenario Wagner, quien viajaba en un avión privado que se estrelló en el centro de Rusia este miércoles 23 de agosto, según confirmaron las autoridades del país gobernado por Vladimir Putin, que está en guerra con Ucrania desde hace un año y medio.
Prigozhin era uno de los siete pasajeros a bordo de la aeronave, que junto con los pilotos y una azafata, sumó 10 fallecidos, en su mayoría pertenecientes al grupo de mercenarios.
Sumado a la lista de muertos por el accidente aéreo está uno de los principales socios de Prigozhin, Dmitri Utkin, un antiguo militar de inteligencia ruso que era una de las figuras más importantes de la organización que a finales de junio pasado encabezó una rebelión armada contra el gobierno de Putin.
¿Vladimir Putin tuvo algo que ver con la muerte de Prigozhin?
Al momento hay tres líneas de investigación sobre el accidente ocurrido en Kuzhenkino, localidad ubicada a 350 kilómetros de Moscú: un fallo de pilotaje, un problema técnico o una intervención exterior.
Además surgió la versión de que Prigozhin presuntamente fue asesinado bajo órden del gobierno de Vladimir Putin, misma que se acrecentó debido a que el avión contaba con todos los permisos para circular y no se habían reportado anomalías en su funcionamiento.
Esta teoría fue lanzada por el asesor de Presidencia en Ucrania, Mijailo Podoliak, quien dijo que Prigozhin había sido liquidado por orden del jefe del Kremlin. Otros de los que respaldaron esa versión fue el magnate ruso Mijaíl Jodorkovski, así como diferentes canales de Telegram que informan acerca de la situación de la guerra.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue otro de los que incrementó las versiones de un asesinato relacionado con Vladimir Putin, debido a que aseguró que “no estaba sorprendido” de que ocurriera el accidente, y que “no hay mucho que pase en Rusia en lo que Putin no esté detrás, pero no tengo suficiente información para saber la respuesta”.
Bloomberg reportó que ciertos funcionarios estadounidenses dijeron que Putin quería vengarse de Prigozhin luego de la rebelión armada de junio que dañó su imagen como líder del Kremlin meses antes de las elecciones en Rusia, además de que “dejó a Estados Unidos, Europa y China desconcertados sobre las consecuencias políticas”.
“Putin es el apóstol supremo de la venganza”, dijo el director de la CIA, William Burns, en el Foro de Seguridad de Aspen el mes pasado.
A pesar del acuerdo entre Prigozhin y Wagner con Vladimir Putin, las polémicas continuaron en los últimos meses, y según especialistas, el líder del grupo mercenario por momentos llegó a eclipsar al mandatario ruso tras reunirse en San Petersburgo con funcionarios africanos mientras el Kremlin llevaba una cumbre Rusia-Áfirca.
Putin ha estado tratando de restaurar su autoridad tambaleante en casa desde la rebelión de Wagner, en medio de una creciente ira nacionalista por la estancada invasión del líder ruso a Ucrania, ahora en su decimoctavo mes.
El presidente ruso ya está haciendo preparativos para su intento de asegurar un quinto mandato en las elecciones de marzo de 2024, incluso cuando la ansiedad se extiende entre los altos funcionarios y los magnates empresariales.
