Kristine y Michael Barnett, de Indiana, Estados Unidos adoptaron en 2010 a una niña pequeña en Ucrania. Pero la pareja denunció que, en realidad, no se trataba de una nena de 10 años sino de una mujer de 23 con enanismo. La noticia dio la vuelta al mundo porque el matrimonio abandonó a Natalia Burnett bajo el pretexto de que había intentado asesinarlos. Por eso fueron imputados por la Justicia de Estados Unidos que los acusa de dejarla en 2013 para instalarse en Canadá.
Aparentemente, la pareja habría sido engañada al momento de la adopción de la supuesta niña. Según estudios médicos ordenados por el matrimonio, la pequeña Natalia Grace en realidad era una persona adulta con enanismo y no una nena. Se basaron en la conclusión del desarrollo de sus huesos, su vello púbico y su comportamiento.
Basado en esos estudios, la pareja se mudó a Canadá con sus tres hijos biológicos, abandonando a la chica a su suerte y sin dinero en Lafayette, Indiana, Estados Unidos. La Policía la encontró en 2014 y abrió una investigación que llevó cinco años.
Según Kristine Barnett, la adopción fue un fraude, porque la nena ucraniana ya era en ese entonces adulta. Para demostrarlo, la mujer mostró una carta escrita por un médico en la que consigna que la edad de la niña era “claramente inexacta”.
Como prueba, el médico se refiere a los registros dentales de la supuesta nena y a su desarrollo sexual adulto. El especialista llegó a afirmar que tenía más de 18 años en 2011.
Pero hasta ahora nada se sabía de Natalia Grace. Pero el diario británico Daily Mail halló a la joven que tiene nuevo hogar en el seno de una familia cristina de Estados Unidos.
Grace vive con cinco hermanos, va a la Iglesia y sonríe todo el tiempo. Su nueva familia la considera su nueva hija adolescente. Mientras el polémico caso tiene todo el tiempo tela para cortar, la joven hoy vive en Indiana con una familia sustituta.
El padre de Natalia, Antwon Mans de 36 años, fue recientemente ordenado como pastor y vive en una antigua casa con su mujer Cynthia, de 39 años.
La pareja sabe de la polémica que hay entorno a Natalia, pero dice que a ella le gusta estar ahí y que no hay marcha atrás posible en relación a la vida entre ellos y la joven.
La pareja cristiana está con Natalia desde 2016, pese a que no fue adoptada legalmente. Ella vive con ellos en la casa paterna y realiza salidas, de acuerdo a los registros en Facebook.
La nueva familia trató de hablar con los padres adoptivos que abandonaron a Natalia, pero no tuvieron éxito. La pareja cristiana usa sus redes sociales para publicar imágenes al lado de la ucraniana que tiene dos certificados de nacimiento, uno que acredita que es menor de edad y el que muestra que tiene más de 20 años.
La familia que originalmente había estado viviendo con Natalia acusó a la joven de quererlos asesinar. Pero la pareja que hoy vive con la mujer con enanismo habla maravillas de ella y marca que nada de eso es cierto.
