Cerca de 500 artistas de Chihuahua exigen cancelar el montaje La golondrina y su príncipe, un musical de AEFE Producciones, concebido, dirigido, con libreto y orquestación de Alberto Espino, que tendrá un costo de 34.8 millones de pesos (IVA incluido), que será cubierto, a partes iguales, con presupuesto municipal y estatal de cultura.
De acuerdo con la información oficial, el montaje es una pieza musical de Alberto Espino, basada en escritos de Oscar Wilde, en el que participan 70 actores en escena, que contará con 12 funciones gratuitas en la plaza El Palomar, de Chihuahua, durante los fines de semana del 11 de noviembre al 4 de diciembre.
La pieza, que es relatada en una ciudad fantástica europea del siglo XIX en la estética del steampunk, contará con la actuación del cantante chihuahuense Jako Navarro (Oscar Wilde), participante de La Voz México en 2021; de Mario Tadeo (Thuy), quien ha participado en obras de Broadway; de la cantante de ópera Carmen Ferrá, becaria del programa de residencias artísticas del INBAL, y las bailarinas Cristina Reynoso y Karime Torres.
De acuerdo con el contrato obtenido por este diario –firmado por María Fernanda Bencomo Arvizo, titular del Instituto de Cultura del municipio de Chihuahua y de Gabriela Guadalupe Andrade, responsable de supervisar el contrato–, cada función tendrá una duración de 2 horas y 15 minutos, para un aforo de 2 mil 943 personas en gradas y sillas, y de 876 personas más en un área delimitada para pantallas LED.
Además, incluye un escenario de 220 metros cuadrados, dos pantallas LED, audio, luces robóticas, microfonía inalámbrica para solistas, coro y orquesta, videomaping y una estatua animatrónica, así como carpas, seguridad privada, la impresión de 34 mil 800 boletos, 15 mil programas de mano, 8 mil carteles, 24 banderas sublimadas, producciones de cineminuto, un spot de radio, la rueda de prensa, 10 mil discos compactos y una señal de video.
Al respecto, la comunidad de artistas y creadores chihuahuenses expresaron, en una carta obtenida por Excélsior, que lamentan que el costo de cada función ascienda a casi 2.9 mdp, mientras que la mayoría de los creadores de la entidad percibe cerca de mil pesos por cada función.
“Con el argumento de que es un espectáculo de ‘primer mundo jamás visto’, los gobiernos estatal y municipal de Chihuahua —que dividieron el costo del montaje en 50%, sin licitación y de manera opaca, violando las leyes y reglamentos existentes para el ejercicio de dinero público—, han entregado en adjudicación directa 34.8 millones de pesos al director de teatro musical (Alberto Espino)”, señalaron los creadores.
Criticaron que dicho recurso represente la quinta parte del presupuesto destinado a cultura en el Estado. “Y (el hecho) desata nuestra indignación, porque previo a estas acciones arbitrarias y discrecionales, se ha privado a los chihuahuenses de la Feria del Libro de Ciudad Juárez, se redujo al mínimo la Muestra Estatal de Teatro, la Feria del Libro de Chihuahua, y se han cancelado programas como orquestas infantiles comunitarias, atención a pueblos originarios y cultura infantil”, agregaron.
El pasado lunes, los creadores promovieron una denuncia en la plataforma Change.org para exigir la cancelación del musical que, al cierre de esta edición ya sumaba 3 mil 767 firmas, en la que reconocen la misión de la cultura como catalizador para la transformación individual y social, y como antídoto para la violencia.
Sin embargo, “luchamos para dignificar nuestros oficios y cultivar y divulgar otros talentos de nuestro estado. Por todo lo anterior, darle más de 30 millones de pesos —casi la quinta parte del presupuesto anual de la Secretaría de Cultura del Estado—, a un proyecto que durará unas cuantas semanas es un insulto que nos duele y nos enardece”, expresaron.
En días pasados, Fernanda Bencomo expresó a medios locales que, si bien el montaje ha generado un poco de ruido, se trata de “una puesta en escena multidisciplinaria donde el talento chihuahuense está presente”; reconoció que “para el tema de la cultura nunca habrá presupuesto que alcance”, pero aseguró que cuando se vea el espectáculo “se entenderá por qué se hace una inversión de esa cantidad” (Excélsior).
