*SE DAN CON LA CUBETA LOYA Y MENDOZA
*RAFAEL ESPINO JUSTIFICA A OTRO SENADOR POR RENUNCIA A MORENA
*ENCUESTITIS DOMINA MOMENTO ELECTORAL
Los panistas Rogelio Loya y René Mendoza ya se andan dando con la cubeta, esperanzados en lograr así que los volteen a ver.
Por un lado Loya mandó poner el grito en el cielo, al darse cuenta de que su compañero paga pautas en redes sociales, para aparecer mayor número de veces visible.
Serían esas acciones posibles actos anticipados de campaña. Omitió decir Loya que él pagó al menos un gran espectacular sobre Paseo de la Victoria, donde se exhibió su rostro, logo de partido y colores.
En lugar de írsele a Enrique Serrano por ser del PRI, se atacaron entre ellos.
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En las filas de Morena, llamó la atención primero la renuncia del senador Alejandro Rojas Díaz Durán.
Consideró el político, que el presidente Andrés Manuel López Obrador y la candidata presidencial Claudia Sheinbaum, han desviado los principios del “proyecto de nación” propuesto en 2018.
Fue un rudo golpe a Morena y acá a nivel local el que opinó sobre el tema, fue el también senador, Rafa Espino.
Entre otras cosas, dijo respetar a su compañero Díaz Durán, por la decisión.
“Disentir enriquece, siempre que se compartan los mismos propósitos. Cuándo eso ya se estima inviable, renunciar es un acto leal. Saludos”, escribió el político que ya ha contrariado anteriormente a la 4T.
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De todas partes andan con ejercicios de medición estadística, para ver los alcances de los posibles candidatos, así como de los partidos o coaliciones.
No son solamente encuestas por llamadas automáticas a números de teléfonos, sino encuestas en línea y los tradicionales cuestionarios en vía pública, por ejércitos de entrevistadores.
La gran pregunta es: quién ordena tanto ajetreo y de dónde sacan recursos.
Un detalle que no se debe perder de vista, es que algunos no son ejercicios objetivos de medición, sino armas de propaganda política utilizados para eso, para influirlos a favor de determinado personaje.
Al ser presentados como una encuesta pero no serlo, se convierte en un engaño; un fraude a los ciudadanos, ya que en pocas palabras son actividades totalmente tendenciosas.